Vistas de página en total

viernes, 4 de noviembre de 2011

Donde habite el olvido

Homenaje al poeta español Luis Cernuda, a 48 años de su muerte.

No es el amor quien muere,
somos nosotros mismos.

Inocencia primera
abolida en deseo,
olvido de sí mismo en otro olvido,
ramas entrelazadas,
¿Por qué vivir si deapareceís un día?

Sólo vive quien mira
siempre ante sí los ojos de su aurora,
sólo vive quien besa
aquel cuerpo de ángel que el amor levantara.

Por allá van y gimen,
muertos en pie, vida tras de la piedra,
golpeando la impotencia,
arañando la sombra
con inútil ternura.

No, no es el amor quien muere.-


Luis Cernuda: Poeta español, murio en México hace 48 años, el 5 de noviembre de 1963. Desde los nueve años comienza a leer y escribir poesía en su Sevilla natal animado por un profesor. En 1926 viaja a Madrid donde colabora con "La Verdad", Mediodía" y "Litoral", conoce a Paul Éluard a quien traducirá más tarde. En 1930 ya tiene publicado algunos poemas en Antologías, asiste a tertulias en compañía de sus amigos Federico García Lorca y Vicente Aleixandre. En 1934 publica "Donde habite el olvido" y "Los placeres prohibidos". En el año 1937 participa en el II Congreso de Intelectuales Antifascistas en Valencia, donde conoce a Octavio Paz, quien será un amigo de toda la vida. En 1938 parte al Reino Unido para dar un ciclo de conferencias, no regresando nunca más a España. Es profesor de Literatura en Cambridge. En 1947 inicia su exilio norteamericano, allí enseña en Massachusetts puesto que desempeñará hasta 1952, año en que se establece en México. Escribe "Poemas para un cuerpo" y sus "Estudios sobre poesía española contemporánea". Visitó a partir de allí varias veces Cuba y en verano impartía cursos en la Universidad de California. Cernuda es especulativo, frío, ligeramente melancólico, nihilista. Pero también un admirable artífice del verso. Sus modelos son Góngora, Valéry y Guillén.  En 1963, fallece a los 61 años en la ciudad de México y es enterrado en la sección española del Panteon Jardín.
Luis Cernuda nunca negó su condición homosexual, factor que le hizo ser considerado en su patria un "raro" y rebelde, dada la mentalidad poco abierta de la España de entonces. "Un país donde todo nace muerto, vive muerto y muere muerto", como dirá en "Desolación de la quimera". 

 Donde habite el olvido,
en los vastos jardines sin aurora;
donde yo sólo sea
memoria de una piedra sepultada entre ortigas
sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje
al cuerpo que designa en brazo de los siglos,
donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
no esconda como acero
en mi pecho su ala,
sonriendo lleno de gracia aérea
mientras crece el tormento.

Allí donde todo termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
sometiendo a otra vida su vida,
sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos:
Donde habite el olvido.-

                                                         Luis Cernuda


Imágenes: pinturas del artista ruso Chaim Soutine (1893-1943), de la escuela de París.




No hay comentarios:

Publicar un comentario