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viernes, 30 de enero de 2015

Playa

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos cono un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                         Kennet Klemets

Poeta y traductor sueco, nacido en Gottrora en 1964. Reside en Gotemburgo. Integra el Grupo Poético Wunderbaum desde 1990. Dirigió las revistas literarias "Hovdini" y "Sheherazade". Su primer libro fue publicado en 1997 y hasta el momento ha presentado siete poemarios , muchos de los cuales han sido traducidos al inglés, francés e italiano. El siguiente poema fue seleccionado y traducido por Herbert Abimorad.


                                                                    "Sus labios cuando leía su rigor.
                                                                     Sabía que ella tenía frío.
                                                                     Yo sé un secreto acerca de ti
                                                                     te sientes segura, no sabes mi secreto" 





BIOTOPO DE LA PLAYA

Aquí llegamos
en chancletas, bañadores y bikini
nosotros, bañistas, lo único
en constante cambio
en este entorno
cruzando adelante
entre otros bañistas
tirados en la arena
de espalda, de estómagos, de un lado
o sentados con sus miradas
entre niños rigurosamente untados con bronceador
afanados en sus juegos
entre los chicos de la ciudad
que juegan al fútbol
o hacen malabarismos artísticos
para sorprendernos
Elegimos la reposera
de la larga fila de reposeras
y de repente, de ninguna parte
viene el que las alquila
con su cartera en el vientre
sin decir una palabra
toma el dinero
despliega la sombrilla
y de la misma manera repentina
desaparece nuevamente
(como los arrendadores de hidropedales
y de trajes de buceo
hay quienes arriendan reposeras
al igual que ellos están 
en ninguna y todas partes)
Ahora nos acostamos aquí
bajo el sol, nos giramos regularmente
como trozos de carne sobre una parilla
(a la distancia parece
que hemos sido dado vueltas
por una mano invisible).

En el cielo
los aviones
se acercan y se alejan
de manera interrumpida
con bañistas nuevos
y los que vuelven a sus casas
(bombea adentro y fuera
sangre en el corazón del biotopo)
Los marroquíes vendedores de helados
con su caja en el vientre
van de un extremo a otro de la playa
gritan: ¡Magnum helado !
Algunas veces dejan su caja
se sientan jadeando
bajo una sombrilla,
se secan la frente y quizás sueñen
con una taza de té de menta
en un café fresco
al otro lado del mar
Las delicadas, musculosas masajistas,
todas asiáticas
menos María Masajista
la alemana que en confianza dice para que todos oigan
que es la única con formación de masajista
se mueve con rapidez en la playa
con sus bancos plegables de masajes
de repente ¡bang! Se enfrentan dos de ellas,
una masajista ha estado
en el dominio de la otra
se pegan, luchan
mientras nosotros los bañistas las miramos
divertidos y en silencio
El socorrista, encaramado en su silla alta,
busca con su mirada indolente y altivo
sobre el agua
como un gran depravador

 En el agua se mueven los hidropedales
se sacuden alrededor, en círculos
como enormes insectos
que perdieron un ala

 Muy encima
ciernen los planeadores
en su propia superioridad en el cielo
Y allá a lo lejos, debajo del horizonte,
viajan los refugiados en inestables botes
pero no sabemos nada de ellos
antes que un oleaje nos alcance en la playa
una, y otra y muchas veces
que pega y ruge hasta que todo vuelve a ser
como antes
no, no notamos nada
oímos el rumor
sobre cuerpos muertos
que flotan
en una playa desierta europea
algunos kilómetro de aquí
Desconocidos el uno del otro
vivimos uno del otro
en este sistema de operaciones,
en esto de dar y tomar
todos somos extraños
pero ninguno es Extraño,
nadie camina sin meta,
todos tienen su lugar y tarea,
todo y todos
estamos incluidos en esta balanza del biotopo
bañados en el sol
Temprano por la mañana
mientras la mayoría
de los habitantes del biotopo
duermen en hoteles y cuevas
los limpiadores conducen
sus tractores
de un alado a otro de la playa
rastrillan las huellas del día anterior
preparando el lugar
para este nuevo día.-



                                                                     Kennet Klemets 









quiquedelucio@gmail.com

miércoles, 28 de enero de 2015

Animales que sueñan

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto  de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                         Gloria Marecos Rodas


Poeta y artista plástica paraguaya nacida en Ypacarai el 17 de febrero de 1953. Licenciada en Ciencias de la Educación y docente. Ha publicado los poemarios: "Los motivos del oasis", "Zona secreta", "Animales que sueñan" y participado en siete poemarios colectivos. Es integrante del Taller Literario de la Universidad Iberoamericana, desde 2005. Coordinadora del "Colectivo de Arte Japay" y miembro de la Organización Internacional de Arte Popular de la Unesco.



                                                                        "Y al final juego que el tiempo
                                                                          no se detiene con tu ausencia
                                                                          ni con mis ganas de morir
                                                                          sino sólo cuando un poema
                                                                          se hace nudos de cristal"





ANIMALES QUE SUEÑAN

Entre la turbulencia
que precede a las luces nacientes,
hay animales ígneos que se agitan,
hay animales verdes en movimiento.
Animales que sueñan
con la certidumbre abierta del pensamiento,
y animales que duermen en la memoria,
bestias de cristal...de esperas...
de aguas y de silencios.
En tanto...
soy loba en vigilia,
acechando el despertar de la luna
entre los cúmulos de la noche.-


GAVIOTA TRISTE

Soy sueño de gaviota triste
nacida de un vientre sin mar.
Sobre las orillas
de esta matriz de tierra,
se ejercita día a día
una vocación de playa,
de mareas y caracolas,
porque inadvertido
entre las arterias
de sus apretados límites,
palpita y resplandece
el inagotable piélago
que otorgan
las inmensidades oníricas.-


EFECTO MARIPOSA

¿Cómo ignorar el poder
que es la fragilidad
su astucia disimulada?
Si en la inquietud del Universo,
un lento, errático y delicado
suspiro de alevillas,
en su aparente levedad,
entraña la turbulenta metamorfosis
de las vibraciones del viento,
que va cavilando céfiros
y vomitando tempestades.-


PERROS HAMBRIENTOS

Estás allí...
Como silbido inquietante,
atrapado en las cavernas
subterráneas del intelecto,
esperando el milagro
de ser tocado desde afuera
por la semilla vital
del coraje y la palabra.
Y yo aquí...
Gritándote...
Suplicando desde mis orillas
que me voltees el alma,
que me gires la mirada,
que me ahogues de asombro,
que reviertas mi reverso
y sueltes al fin
a los perros hambrientos
que aúllan en mi mente.-



DISIMULO OTOÑAL

En un espacio
diminuto y secreto
de este otoño carmesí
entre la vibración imperceptible
de las hojas que caen,
una convulsión cautelosa
delata tu presencia.
...Aún vives en mí.-


MIGRACIÓN

Un fluido
espeso y escarlata
de pájaros cantores
emigra desde el otoño
de mis venas
hasta el trópico de tu piel.-


COMO VIENTO

Llegas de improviso
como viento de verano.
Penetras la piel,
exploras,
arrastras
y deshojas
mucho antes que el otoño.
Y tiemblan mis raíces.-


PERMANENCIA

Se puede mirar la vida
desde los espejos otoñales
atrapados en el espejo.
Pero el secreto cristalino
de la trascendencia
está en mirar los pájaros
que emigran,
hasta que los ojos
se tornen polvo...o viento.-



                                                                             Gloria Marecos Rodas





Imágenes: Pinturas de artistas paraguayos contemporáneos



quiquedelucio@gmail.com

martes, 27 de enero de 2015

Epitafio

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                       Clara Eugenia Ronderos

Poeta, narradora y catedrática colombiana nacida en San Gil, Santander. Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Los Andes y tiene un Doctorado en Literatura y Lingüística en Amherst, EE.UU.  Ganó el Premio Carmen Conde de Poesía de Mujeres, por su libro "Estaciones en el exilio". Actualmente trabaja como profesora en la Lesley University de Massachusetts, Estados Unidos. Otros de sus poemarios: "Esa niña" (2010), "16 Poemas de Raíz de Silencio" (2002), "Poemas Bilingüe " Mothertongue , Edición de la Univ. de Massachusetts., etc.


                                                                       "El cántaro se ha roto.
                                                                        De la fuente a la casa
                                                                        De la casa a la fuente
                                                                        Se ha topado al fin con la piedra" 






EPITAFIO PARA LA MUJER DE LOT

Dio vuelta a la cabeza
para mirar lo que dejaba
y la sal se hizo piedra en su cintura
y el paso detenido de su pie,
suspendida proyección de nitro y de ceniza.

La lluvia sobre la estatua
suda y llora sal
y en la casa vacía
el rescoldo se apaga
esperando su llegada.-


TEMOR Y SILENCIO

Profundo se agita el mar
ola con ola.
Furia.
Profuso en su cárcel;
salado y verde
contra las murallas.
Se finge calmo
y dormido
al otro lado del muro.
Se finge
murmullo lento,
se finge
acuario.
Pero brama por dentro
y sube de espuma
hasta el límite oscuro
de la pared de piedra.

Cadáveres hinchados
flotan sobre su espuma violenta de blancura.-


SEDUCCIÓN

Fortaleza que la espuma amenaza
como en juego.
Va y viene,
y regresa con mil caras,
con velos, con brillo.
Despedazando el sol,
se lleva granos diminutos.
Luego cava en el profundo foso, otro foso
que socava la estructura.
La mece,
Adormecida, deja a las fauces blancas
su cuerpo blando, verde
ahora, parte de la sal y de la transparencia.

Hay que saciar al animal

Fuego, comida y pierna suelta
hasta que suba el sol
para que nazca esa otra que se oculta
cuero adentro

ruedan a chorros
sudor y deseo que se juegan
el todo por el todo
y de la nada
sale

palabra articulada, del gemido
sentido, de la furia ciega.
Presa despedazada
secando al sol
para que en mesa pulida
haya manjar

Dejar morir al animal
exhausto, ahíto
y de su carne satisfecha
surja una voz
que cante.-


NECESITO LA RABIA

y no las aguas mansas
¡Líbrame Dios !
Fuerza y desbordar el muro de piedra
que se levanta
cuando bajo la cabeza
y miro humilde
el camino que pisas
o mis pies.
Rabia que estira el cuello
en ramas cargadas de frutos
la mano en cóncavo recipiente
donde se apoza el agua
que enerva de savia reciente
hasta la oscura raíz.
Necesito romper sonrisa y velo
que la cubre y lo duplica impasible
y darle con el pie y con el puño
y entrecejo que frunza el mundo
a todo y a todos, darle duro
(como le dieron a Vallejo).

Recoger los pedazos
tristes, tristes,
pagar pacientemente otras palabras
que lloren cuando venga,
después de la tempestad, la calma.-


TIERRA FIRME

Piso el terreno de mis sueños
y dejo hundir el pie
profundo en el viscoso material.
Quiero decirlo todo.
De una vez dejar que salgan
la baba y la luz y la tiniebla.
Pero abajo, tira la gravedad
y aterra su cálida humedad
de muerte reciente,
de vida apenas retoñando,
de vientre convulso,
y de estertor.
Y ya no quiero, no quiero, no.
Me agarro fuerte de la cuerda
donde saco cada mañana mis miserias
y jalo, asqueada,
y sacudo y seco y limpio
y corro a la vigilia sólida del miedo.-


                                                                         Clara Eugenia Ronderos







Imágenes: Pinturas del artista ruso  Marc Chagall   (Vitesbk, 1887 - Saint Paul, Francia, 1985)



quiquedelucio@gmail.com

domingo, 25 de enero de 2015

La luz de luna


Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                 Jennifer Minniti - Shippey

Poeta estadounidense nacida en 1955. Con Done Dating , en 2008, ganó el Fool Poetry Chapbook Competition. Actualmente enseña Literatura en San Diego State University. Sus poemas han aparecido en Tar Río Poesía, Jackson Hole Review, y muchos otros. Los siguientes poemas fueron traducidos especialmente por Eduardo Valdez Lozano.







LA LUZ DE LA LUNA

Sé que es una posición deseable
pero creo
tengo cualidades necesarias
para tener una gran muerte.
Amo dormir hasta tarde. Si fuera contratado,
nadie morirá por la mañana.
Prometo honrar los últimos deseos, tantos
como sea posible.
No acepto
ningún soborno.
No causaré
ningún dolor, yo
como la muerte, solo vendré con la lluvia.
Vendré con pelo de ducha-mojado, y recortaré
las alas del cartón, y las serpientes negras
tatuadas alrededor de mis muñecas-
sus cabezas tragarán sus colas,
entonces recordaremos
que estamos hechos de tierra,
y como la tierra hemos de volver.-


EL ECLESIASTÉS DEL PROSTÍBULO


Para todo hay una temporada
y un tiempo para cada propósito bajo luces de neón

tiempo para abrir las puertas del viejo
teatro de la ópera
para un pequeño garrotero y ningún cover que cobrar

tiempo para champaña y burbujas en la champaña
tiempo de sostenes sin tirantes
tiempo para perfume cítrico
en las cremalleras

para pezoneras rosas para borlas chispeantes
para tacones y uñas de pies pintadas

tiempo para presentarte con un bailarín
de cabello oscuro
para dar un nombre falso a cambio del suyo

tiempo de mirar su tatuaje de estéreo doblar y estirarse
al tiempo que se inclina y palidece
su piel sobre el escenario

tiempo para ordenar un baile para tu amiga lesbiana
para ordenar un baile para ti

tiempo para encender el cigarrillo de la bailarina
de cabello oscuro
para quizás llamarla dulzura o quizás no

hay por último un tiempo de Johnny Walker Azul y mareado
por las luces intermitentes desear un taxi

un tiempo para salir del este de Denver
es tiempo caballeros
es tiempo.-


CONTANDO CABALLOS SALVAJES

La manera más eficiente
para contar
caballos salvajes
en vuelos de helicóptero-la gran
velocidad y el zumbido
de las aspas en el aire conducen
a los potros de los arbustos
Los contamos
tres picazo
siete color castaño
dos ruanos
todos grises con polvo de la llanura
Sobre el bajo aleteo vibrante
del helicóptero viene
el ruido
de pesuñas negras
agrietadas por piedras movedizas
y esquisto
ellos galopan hacia el barranco
debajo de ellos, el río
justo cuando parece
que los perdemos a todos
sortean el borde
las melenas arremolinan
como alas de chorlito sobre
arena de sal húmeda.-


SI MURIERAS PRIMERO

Déjame al menos juntar
tus olores
como espécimes: tus axilas, suéter
de lana,
dedos amarillos de cigarrillo. Necesitaría
tomar la huella de tu pie
y grabar tu risa.
Llevaré estos archivos al exilio:
mi cuerpo a Santa Helena donde los barcos
ya no atracan,
una roca en el océano,
una estación polar donde
el viento ruja

y los osos tiren la puerta abajo.-



                                                            Jennifer Minniti - Shippey








Imágenes: Pinturas del artista de Estados Unidos, Edwin Blashfield





quiquedelucio@gmail.com

viernes, 23 de enero de 2015

Despedazando ovejas


Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                     Sebastián Rivero

Poeta uruguayo nacido en Colonia del Sacramento en 1978. Es periodista y profesor de historia. Publicó los libros de poesía: "Cuerpo y sombra de la voz" (2003), "La cárcel del silencio" (2005), "Pequeños crímenes cotidianos" (2008), su obra está contenida en las antologías "Poesía del Litoral" (2007) y "Novísima Poesía Uruguaya" (2011). Dentro de la investigación histórica y cultural editó: Antología de la poesía coloniense , en el año 2000.


                                                          "En la mesa del sacrificio los lingüistas
                                                           estrujándo el manantial oculto de la lengua
                                                           recorriendo sus propias entrañas
                                                           atisban una luz para su ceguera"





DESPEDAZANDO OVEJAS

despedazando ovejas
tiñendo de rojo
la lana que pronto
mecería el sueño de Agamenón
no presiente Ayax
el vuelo del engaño
la acechanza tendida
por la locura,
en su desvarío
Aquiles cae bajo su espada
una y mil veces,
ignora que otro filo
lo acosa
imprevisible como
una flecha
y que arrancará
sus ojos
cuando despierte
de la fiebre
en que fue un títere
de una comedia atroz
(vasto teatro del mundo).
se arrancará los ojos
igual que el ciego
que selló su destino
entre blancas espumas
de mareas de palabras.-


LA ENFERMEDAD DE NOVALIS

ella naciendo entre escombros

¿cuántos fluidos corporales
serán extraídos?

un relámpago de metal
deshace las entrañas

fue hecho este polvo
para que sufrieras

¿desagotar la fuente del grito
hasta que nazca el páramo?

aquí comienza la soledad

el gusto ácido en la boca
la noche
el sudor
las pesadillas
(y el jadeo)

música triste
es cierto

¿la poesía nace aquí?

el poeta tendido en la
cama
bajo el paraguas
oprime una pulga
entre sus dedos
y la observa

ella naciendo entre escombros.-


VERDAD FINAL

siempre solo, naciendo alto en la noche
pregunta vacía: no refugio, morada
claustro cerrado, fuego extinto, nada
monólogo quedo, palabra sin derroche

país sin nombre, nadie que te estreche
te posea, te defina, en su mirada
tierra ajena, landa, muralla alzada
a la ansiosa soledad, creas la noche

sin vados, ni puentes, estéril río
vacuo confín donde perdido ando
espacio cruel, cruel desvarío

compartimos el tiempo, aquí estando
para siempre solos, simplemente contigo
verdad final, tú, mi cuerpo, mi enemigo.-


UN LUGAR

ruinas y máscaras
engaño de lo antiguo

una calle desciende
junto a la muralla
(presa en una instantánea)

odiosa belleza de lo quieto
odiosa belleza de lo antiguo
playas atronando en lechos de piedra
y luego nada

pasa el extranjero
sin dejar huella.-


LOS TRES RÍOS
I

ardua tarea señalar las aguas
atravesando la imagen del junco
retener otra ve, en el rostro y la memoria
el viento susurrando en laderas de orquídeas y fuego verde
mirarás tan sólo el resplandor y no lo perdurable
del sol hiriendo al río, brillando en las retamas.-


                                               
                                                                        Sebastián Rivero







Imágenes: Pinturas de la artista estadounidense Mary Cassatt.



quiquedelucio@gmail.com

miércoles, 21 de enero de 2015

En el tiempo


Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                            Marlene Durán

Poeta, escritora e investigadora boliviana nacida en Oruro en 1956. Es graduada de la carrera de Comunicación Social de la Universidad Técnica de Oruro. Ha publicado en poesía: "Grises" (1977), "El otoño de la almohada" (1984), "Salmos" (2001), etc. Ha participado en la antología "Mujeres orureñas" (1999) y en el Diccionario de autores orureños (2006). Obtuvo la Mención Honrosa en el Concurso Nacional "Franz Tamay" (1978). Colabora con los diarios "La Patria" y en "Nace la luz".



                                                                      "Afuera llueve
                                                                       parecen lidiar entre vientos y truenos,
                                                                       cierro los ojos
                                                                       y viene a esta fontana el eterno horizonte"  




EN EL TIEMPO

I
Está aquí, gigante en la palabra
vivo en la historia de tus alegatos,
con el adagio de
la Balada del Agua del Mar.

II
Tu hálito se fue apagando,
y no hubo desazón
en tu corazón
que estaba hecho para la remembranza.-


POEMAS DE FUEGO
IV

Caminábamos taciturnos,
desvelados
por la canción de cuna
por el insomnio de nuestros hijos.
Teníamos que aumentar la dosis de ternura,
prometimos escalar sin temblor
todos los contornos
de las piedras,
de las sombras
a pesar del invierno
porque el amor
amor son ellos
marineros que navegan
en el mar de nuestros ojos
y que arden en la luz
del medio día.-


III

Amor mío
cuando me envuelves
con la piel de tu cuerpo,
siento que el destino
está en las palabras
en la ventana que vigila
el faro de la calle,
en el signo del amor que nos une.-


II

Veinte menguantes que andamos juntos
enrollando tempestades
para iluminar nuestros días,
para detener la palabra
en un desvarío
en un romance
donde la verdad
vive cada mañana.
Es punto por punto
donde tejemos el beso,
la memoria
el horizonte
ser indelebles en nuestra historia
para la eternidad de nuestras almas.-


SENTIMIENTOS

Son las veladas del insomnio
que me vuelven a la luz
cierro los ojos
para no recordar nada
para no sufrir
por la lluvia que cae.
Hay un cielo gris
fugazmente encendido por los relámpagos
que se pierden en la sombra.
¿Sabes?
Odio las visiones
las premoniciones
y el destino reducido en las ojeras.
Siento ese abismo
que nos separa
fiel amiga
pintora del alba,
me doblas en memoria
y no hay murallas
en tiempo limitado
sobrevivimos
con nuestras confidencias
con las lunas de los sueños,
con los signos del silencio.
Sabemos
que las ventanas se van cerrando
tú estás afuera como la golondrina
que debe alzar vuelo
y yo aquí dentro de este acento
con la extraña melancolía
de sentir que te quedas dentro de tu obra
visible, como la vida.
Lloro sin rencor
por la hoz
que se amotina,
tu voz un tanto ronca, inconfundible
como el agua de la fuente
me habla de los murmullos del alma
de los dolores de la piel,
de la rotonda
y de tu ojo abierto.
Y aunque pasen brumas
o aves sin nombre
dejas huella
tus pinturas frescas
las hojas verdes de la coca
tu mirada libre,
libre del ruido de los huesos,
que renacerán con la corola
intacta en el alero
en el vértigo de otro sendero.-


COMO SIEMPRE

Qué más puedo darte
si eres el iris de mis ojos,
si en la lluvia
has escrito mis memorias.
Arcano,
has aclamado desde el torso
hasta la greda de mis dedos
para moldear mi cintura
y yo te amo.-


                                                                            Marlene Durán





Imágenes: Pinturas del artista argentino contemporáneo Carlos Alonso.


quiquedelucio@gmail.com

martes, 20 de enero de 2015

Libro de los cielos

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creaores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.


                                                                                Alejandro Susti

Poeta, compositor y profesor peruano, nacido en Lima en 1959. Doctor por la Universidad Johns Hopkins. Docente de la Universidad de Lima y de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya.. Como poeta ha publicado. "Corte de amarras" (2001), "Casas de citas" (2004), "Cadáveres" (2009), "Escombros de los días" (2011), etc. Como investigador ha publicado distintos estudios en su país y en Argentina. Actualmente prepara una antología de la poesía peruana de los últimos cuarenta años.

     
                                                                         "Aquí dentro
                                                                          naciéndonos un terror desconocido
                                                                          cosiéndonos las venas
                                                                          cortándonos la cuerda del aliento"






LIBRO DE LOS CIELOS

Siglo a siglo esperando
alumbrarse en el libro de los cielos
la promesa repetida en el canto de las sirenas
la delicia intacta de una doncella
entre flores y abanicos hurtando miradas
las banderas de la victoria
los estandartes del crepúsculo
sobre la sangre de los prados
y los restos de la batalla:
tullidos rostros del desconsuelo
y del desamparo

Siglo a siglo viendo pasar
ciervos turbados en un beso de rosas
bosques derribando el pesado
sueño de sus búhos
esmeraldas de brillo antiguo mecerse
entre las estrellas del invierno
juglares de poca monta cargados de alforjas
y memorias olorosas a curtiembres de caballos
a combates atascados en la punta de una lanza
a duelos de palabra que ahora poco valen
en la balanza del usurero
o en la mano del verdugo

En los mercados de telas raídas y baratijas
los libros usados se agolpan
en su recuerdo de aventuras
las armaduras en su golpe silenciado
los jubones en la tristeza
de sus botones ahora inútiles
y no hay máscara
partitura
o pluma de escritura
que vaciada de su sonido
se conforte en el óxido seco del olvido
o bajo el vientre de la tortuga
que el tiempo desgarra

Y yo sentado
rumiendo mi hueso de fortunas esfumadas
el peso de doblones que no escucho
de martillos que tañen el vacío de mis bolsillos
las uñas carcomidas por el plomo del segundo
los ojos envueltos en la nube
del polvo que me cubre y me sostiene
inclinándome a buscar y nunca encontrar
la lente
el compás
el sueño que me guíe y me disponga
al brillo de unos ojos
al arco de una estrella
que me devuelva
la promesa
el voto
la vigilia vivida y abierta
en esta página del libro de los cielos
en esta víspera del tiempo
dormido y en silencio
repetido.-


CÍRCULO

Será posible
que vea yo ahora el mundo con tus ojos
y tiente las cosas con esta mirada
que abriéndose de repente me indaga
pregunta
se aparta

Que seas
en el aire de tus ojos
dedos sin memoria
asiendo los días
el tiempo de ser
tu cuerpo brotando
en el lazo
de mi tiempo

Y me lleves
en tu mano apretada
a enseñarme los pasos
los pájaros
la mirada en el mundo posándose
a inventarse de nuevo.-


LABIOS

Todo lo que tocan mis labios es silencio
todo lo que beben estas palabras:
un perro ladra detrás de mí
(no lo escuchas)
húmedos fósforos de la mañana
(no los tocas pero en ellos te quemarías)

Planto un árbol en tu patio
un pozo y en su garganta una canción
(pero acaso no hay árbol
patio canción y menos cenizas)
y la nieve empieza a caer cubriendo tu mirada de
lágrimas
de cenizas de un cielo antiguo
que no cesa en el ojo de los
copos
y sales
y te cubres de miríades de copos estrellándose en tu
luz

Acaso escuchas el silencio
de este cielo deteniéndose en las ramas
y en tus ojos encenderse un fuego nunca olvidado
acaso un bosque de nieve de flores suspendidas y troncos
sumergidos
y en él un ciervo restañando la herida del silencio
Sangra alba de los bosques de invierno
de negras cicatrices y níveos dedos
sangre de tus manos en esos bosques sumergidas
cubriéndose de lágrimas antiguas
de pisadas de ciervo en la huida del silencio

Pero dije un árbol y en su patio un pozo de antiguas
cuerdas y antiguos ojos
y en él una canción de nieve fundida que no regresará a
tus labios
y un perro ladra detrás de mí
un perro que repite palabras de ausencia.-


                                                                                   Alejandro Susti










Imágenes: Pinturas del artista español contemporáneo David Agenjo




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domingo, 18 de enero de 2015

Los formales

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                       Mario Benedetti


El gran escritor uruguayo nació el 14 de septiembre de 1920 en Paso de los Toros y falleció el 17 mayo de 2009 en Montevideo.



                                                                      "La esperanza tan dulce,
                                                                       Tan pulida, tan triste,
                                                                        La promesa tan leve,
                                                                        No me sirve"






LOS FORMALES Y EL FRÍO

Mientras comían juntos y distantes y tensos
Ella muy lentamente y él como ensimismado
Hablaban con medida y doble parsimonia
De temas importantes y de algunos quebrantos.

Entonces como siempre o cono casi siempre
El desvelo social condujo a la cultura
Así que por la noche se fueron al teatro
Sin tocarse un ojal, ni siquiera una uña.

Su sonrisa la de ella
Era como una oferta un anuncio un esbozo
Su mirada la de él
iba tomando nota de cómo eran sus ojos.

Y como a la salida soplaba un aire frío
Y unos dedos muy blancos indefensos y tristes
Apenas asomaban por las sandalias de ella
No hubo más remedio que entrar en un boliche.

Y ya que el camarero se demoraba tanto
Llegaron cautelosos hasta la confidencia
Extra seca y sin hielo por favor y fumaron
y entre el humo el amor era un rostro en la niebla.

 En sus labios los de él
El silencio era espera la noticia era el frío
En su casa la de ella
Halló café instantáneo y confianza y cobijo.

Una hora tan solo de memoria y sondeos
Hasta que sobrevino un silencio a dos voces
Como cualquiera sabe en tales circunstancias
Es arduo decir algo que realmente no sobre.

Él probó sólo falta que me quede a dormir
Y ella también probó y por qué no te quedas
Y él sin mirarla no me lo digas dos veces
Y ella en voz baja bueno y por qué no te quedas.

Y sus labios lo de él
Se quedaron gustosos a besar sin usura
Sus pies fríos los de ella
Qué eran sólo el comienzo de la noche desnuda.

Fueron investigando deshojando nombrando
Proponiéndose metas preguntando a los cuerpos
Mientras la madrugada y los temas candentes
Conciliaban el sueño que no durmieron ellos.

Quién hubiera previsto aquella tarde
Que el amor ese célebre informal
Se dedicara a ellos tan formales.-


LOVERS GO HOME

Ahora que empecé el día
Volviendo a tu mirada
Y me encontraste bien
Y te encontré más linda
Ahora que por fin
Está bastante claro
Dónde estás y dónde
Estoy.

Sé por primera vez
Que tendré fuerzas
Para construir contigo
Una amistad tan piola
Que del vecino
Territorio del amor
Ese desesperado
Empezarán a mirarnos
Con envidia
Y acabarán organizando
Excursiones
Para venir a preguntarnos
Cómo lo hicimos.-


TODO LO CONTRARIO

Colecciono pronósticos
Anuncios y matices
Y signos
Y sospechas
Y señales

Imagino proyectos de promesas
Quisiera no perderme
Un solo indicio.

Ayer
Sin ir más lejos
Ese ayer que empezó siendo aciago
Se convirtió en buen día
A las nueve y catorce
Cuando vos
Inocente
Dijiste así al pasar
Que no hallabas factible
La pareja
La pareja de amor
Naturalmente.

No vacilé un segundo
Me aferré a ese dictamen.

Porque vos y yo somos
La despareja.-


TODO VERDOR

Todo verdor perecerá
Dijo la voz de la escritura
Como siempre
Implacable.

Pero también es cierto
Que cualquier verdor nuevo
No podrá existir
Si no hubiera cumplido su ciclo
El verdor perecido.

De ahí que nuestro verdor
Esa conjunción un poco extraña
De tu primavera
Y de mi otoño.

Seguramente repercute en otros
Enseña a otros
Ayuda a que otros
Rescaten su verdor.

Por eso
Aunque las escrituras
No lo digan
Todo verdor
Renacerá.-


                                                               Mario Benedetti






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viernes, 16 de enero de 2015

Mar de otoño



Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.




                                                                        Santiago Gil García

Poeta, narrador y periodista español nacido en Gran Canaria en 1967. Cuenta con más de una decena de libros publicados en los que se destacan libros de relatos, poesía y narrativa. Su libro de poesía "Tiempo de Cecilia" fue publicado por el Ayuntamiento de Las Palmas en 2006, "El color del tiempo" es de 2007 y "Una noche de junio" de 2010. Su último poemario es "Trasmallos", Ediciones La Discreta, 2014. Colabora con artículos de opinión y críticas literarias en medios de comunicación de todo Europa.

                                                                 "Quedan los números que no marcaste,
                                                                  los amores que no llegaron a ninguna parte.
                                                                  Ni siquiera recuerdas los prefijos
                                                                  que tus dedos tecleaban esperanzados" 




MAR DE  OTOÑO EN PRIMAVERA

Este mar triste de otoño en primavera,
una avenida que atardece mojada por la lluvia,
bufandas que ya no están olvidadas en los cajones,
paraguas que rompen el viento de la costa,
y tú tratando de explicar por qué me dejas.
Aún recuerdo cada una de tus palabras
confundidas con el olor de la tierra mojada
y la brisa de mar adentro que traía el viento.
No es que no me quisieras,
ni que hubieras dejado de adorarme.
Según tú fue el tedio, el hastío,
los domingos aburridos e interminables.
Dices que no hay otro, ni otra, ni ninguno,
que es parte de la vida esta derrota.
En fin, que el futuro te regale divertimentos,
que nunca más te venza la desgana, la monotonía,
ni el desamor, ni el desencanto,
ni te quedes jamás, dios no lo quiera,
ante uno de esos mares tristes
de otoño en primavera.-

SERENIDAD

Tocas mi cara una y otra vez estrenando la vida,
juegas a reconocer todos los sabores que te rodean,
sonríes pletórica o te enrrabietas caprichosa,
y todo te lo quieres llevar a la boca,
o levantas las manos, ansiosa,
queriendo alcanzar el cielo.
Tu mira llega serenando
cataclismos a lo largo del tiempo.-


MENSAJES

AL final somos botellas sin nombre
que arriban a costas naúfragas de olvido,
mensajes que se borran en el tiempo,
o que llegan cuando no queda nadie,
cristales que luego pulen los océanos
confundiendo nuestras cenizas con la arena.-


CAMPANAS

No recordaba el tañer de estas campanas,
siguen repicando cuando llega la alegría,
golpeando quedamente cada hora que pasa,
entristeciendo la tarde si traen algún muerto.
No importa que hayas estado lejos muchos años.
Ellas te siguen recordando
que cada vibración es eterna,
un eco interminable que acaba expandiendo
tu propio universo,
un sonido lejano que a veces
se acaba entubiando de nostalgias,
el golpe monótono del tiempo
que despierta a las palomas de la plaza.-


LA FIESTA

No digas que no te lo advirtieron.
Vivir es jugar al escondite contra uno mismo,
disparar todos los días la ruleta rusa del azar,
gozar nirvanas, cavar fosas,
o andar por páramos interminables
esperando milagros que nunca llegan.

La vida es una inasible perplejidad.
Por eso no sabemos nunca qué ponernos,
ni cuándo diablos acabará la fiesta,
ni si estamos haciendo el ridículo en
mitad de la sala.
Y encima los bailes son cada vez más difíciles.
Y también uno se cansa mucho antes.-


REVOLTURAS

Me he encontrado una cama
revuelta de amor y sexo.
Me perderé entre sus sábanas
como si entrara en una ciudad prohibida,
rastrearé los restos
de los besos y de las caricias,
y dejaré que la noche siga
creyendo que pasa de largo.
Nunca duerme solo quien se recuesta
donde alguna vez amó.
Todas las sábanas guardan la memoria
de los cuerpos deseados.-


                                           
                                                                           Santiago Gil García 


Imágenes: Pinturas de la artista ucraniana Kateryna Bilokur





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miércoles, 14 de enero de 2015

Por un amor

Cuarto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.


                                                                     Isolda Dosamantes

Poeta mexicana nacida en el estado de Tlaxcala, en 1969. Es Licenciada en Ciencias Políticas y Administración por la Universidad Autónoma de Tlaxcala. Tiene la Especialización en Literatura Mexicana y el Diplomado en creación Literaria de la Sociedad General de Escritores de México. Ha publicado diversos poemarios, entre los que se destacan: "Altura Lustral" (2001) y "Utopías del olvido" (1997). Y en revistas culturales como "Oráculo", "Molino de Letras", "Deriva", etc.


                                                    "Soy la mujer de la cuesta 
                                                      ando por los senderos
                                                      camino por azoteas de teja mirando el horizonte
                                                      busco tierras sedientas de maíz"  








POR UN AMOR

Ojalá pudiera nombrarte.
Sobre tu pecho un amuleto incandescente.
Eras el fuego de la mesa
incendiabas la sala con tu voz:
cantabas las palabras de un poema
tus ojos-águila atravesaban a la gente
hasta encontrarse con los míos,
después fue caminar en círculos,
entre calles nocturnas
y sonrisas sonámbulas,
amanecer en otro pueblo,
comer para amainar la cruda,
andar por las fuentes de Durango
y despertar al sol de la ciudad.
Te me perdiste.
Pasaron días que se hicieron años
sólo tu voz en las revistas.
Hasta una tarde solitaria
cuando desandaba en Álvaro Obregón
el abrazo feliz al encontrarnos:
tu veste de mezclilla y tu amuleto,
unas copas de tinto en nuestros labios
y tus ojos-águila que cruzaron mi saliva
provocaron el fuego de mi vientre
y fuimos con urgencia hacia la noche
para bebernos todo el vértigo de años.
Sin cuestionarnos el tiempo por venir
ni el viento rondando nuestros cuerpos
sólo fuimos dos lazos hecho nudo
cuerdas girando en los sabores de la carne,
nos sorprendieron las horas del deseo,
llama desnuda de las pieles,
fue tan perfecto
que esta noche solitaria del otoño
hago un brindis con té verde
en memoria de tus besos.


CUERVOS EN LA MEMORIA

Mis manos danzan sobre tu espalda,
y nace en mis ojos un brillo de alegría,
es un goce el aroma de tu piel en mis cabellos
es río que nace en mi entrepierna.

En la penumbra de la luna
cuando nuestros cuerpos encuentran el sosiego
soy dichosa de tan libre,
en cada paso la certeza de la luz.

Soy una luciérnaga constante,
burbuja de tus labios
con esa forma sutil de tus miradas.

Soy la bella emperatriz de tus anhelos
gacela entre montañas,
tu cáliz y tortura.

Soy gacela, luciérnaga, burbuja
soy veneno, emperatriz y lágrima
en el instante que me estrello con tu olvido.
Soy vértigo, ensoñación del aguamala
y busco en los escombros
descubro entonces el otro lado de mi piel
y me estremezco.
No sé cuando te perdí, ni donde reencontrarme
¿dónde el brillo de luciérnaga,
en qué beso, en cuál esquina ?
Y soy pescado de mil cañas.

Y soy pescado de bambúes y de carrizos
soy pescado
y me recuerdo en la sonrisa de una niña.-


FLOR DE LOTO
I

Si alguna vez amé quisiera recordarlo,
sentir el aleteo,
luciérnaga entre milpas
gacela en pastizales.

A veces quisiera un rostro cerca
de mis labios
y caminar las olas,
jugando con el mar.

Tan sólo soy un pájaro
que vuela libre
y busca entre sus vuelcos
una rama en que abrigara del calor.

II

Soy una mujer
en busca de algún lago.

El lago Oeste viene hacia mis ojos
es parte de mi cuerpo,
en su tiniebla me acurruco.

El lago me refleja
en sus sauces llorones.

Soy flor de loto que renace
en medio de sus hojas,
rodeada de llovizna
soy sirena
y con mi tono de colores,
encuentro una canción al centro de mi vientre.-


TE ESCUCHO PINTADA LAS OJERAS

Caminaríamos una calle juntos
si no fueras aceite que quema y se consume.

Del barro nos fundimos espirales
las sábanas de hotel
se agitan a distancia.
Eres sólo un mal día
dolor de espalda
un peso que no quiero tener.

Con este conjuro te ordeno que te vayas.-


                                                              Isolda Dosamantes




Imágenes: Pinturas del artista estadounidense Henry Asencio ( Los Ángeles, 1971)



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