Vistas de página en total

jueves, 23 de junio de 2016

Gritos y silencio

Sexto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta es una antología cuyo sentido reside en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 1.300 escritores, respetando el derecho de autor.


Publicación N°  1.397-


                                                                                                   Francisco Checa

Poeta y narrador español, nacido en Granada en 1960. Licenciado en Filosofía y Doctor en Antropología Social. Es profesor de la Universidad de Almería, ha publicado por la editorial catalana Icario "Los hombres lloramos en círculos" (2009) con ilustraciones de 17 grandes pintores., "Rincones Deshabitados" , "Estación Azul" y el poemario"El mar que no piso" (Círculo Rojo, 2016). Ha escrito, además, un centenar de trabajos referidos a su función como investigador del fenómeno migratorio.


                                                                                      "Entre el suelo y el cielo
                                                                                       donde los pájaros acuden
                                                                                       sin el plumaje ocre de las noches,
                                                                                       donde las abejas liban
                                                                                       una rosa color humano"     







GRITOS Y SILENCIO

El grito de la esperanza
de la desolación,
a medio camino
entre el vacío y el deseo.

El grito es el clarín ronco
del dolor y el llanto,
a medio camino
entre la angustia y la aurora.

El grito es el tambor
de un enamorado,
a medio camino
entre la ausencia y el beso.


***

El silencio
es la máscara del alquimista
que oculta recuerdos,
el mosaico oscuro de los solitarios.

El silencio
es el aquelarre de los tristes,
la histeria mustia de la soledad.
Es el dintel de la sonrisa,
pátera de la juventud,
la hebilla de los iracundos
lauda funeraria de los moribundos.


El silencio
se refugia en la lucerna de los sabios,
en el cadalso con nardos de los pecaores.

El silencio.-


TODOS LOS ROSALES SERÁN BLANCOS


junto a la ribera del lodo
o en mis campos de estrellas.
Y yo te regalaré rosas blancas
blancas, blancas, siempre blancas...
(o amapolas).

Y cuando crezca algún jardín
que sus rosas no sea blancas,
yo esperaré regalártelas
un día que la nieve
les haya lavado la cara.-


LA LLEGADA DEL OTOÑO

Se me ha colado el otoño
por el costado
y ha herido con hojas
mi memoria dormida...

¡Frío de arrayanes
-con sabor a espuelas-;
noches de verano
-con olor a lunas-!

Se me enredan los sueños
en el reflejo del agua.-


AMANECERES

Yo te veo
todas las mañanas
donde ahora habitas:
sembrado junto al naranjo
y un laurel,
abono de la tierra
que antaño trabajamos;
te miro y te veo
clavado de espinas
de un rosal de inciensos.
Sé que no vendrás,
mas te llamo y oigo,
te saludo...
y sigo,
fanal de argucias y requiebros
por no encontrarte desnudo.
Aun sabiendo que no estás,
te atisbo en la prisa de los días
y sigo...

Oscurece lentamente...
Hasta mañana.-


TRILOGÍA

Soñar por soñar sueño
que llegarás un día,
que no te irás;
que si vuelves siendo
el mar que te regalo
serías el sueño que te trajo.-


***

En tu cuerpo oigo el mar
reflejado en sal, luna y arena,
refrescado en son, ser, agua, fuego.
Tatuada tu figura en la marea,
por la espalda...el viento.-


***

Frente a ti
ma has devuelto a la tierra,
mojado de esperanza
y descalzo de niñez.
Cuando aprenda a hablar contigo
podré contarlo.-


EL MAR POR TESTIGO

Entre el cielo y la tierra
un árbol,
frondoso, erguido, abierto al aire,
inquieto y deshojado
cargado de fruto.
Bajo el cielo
un ciprés;
sobre el suelo
tierra de negro musgo.

Te acercas y susurras tu hambre,
tu dicha enmelenada

y tu pasión por estar viva,
sobre el páramo desnudo
con el voraz deseo de saciarla.
Y te alejas...
deslenguada y hambrienta,
sobre el insaciable abrigo de la carne.

Y te acercas...
(otra vez!)
y te alejas...
y llegas al tiempo que esa boca
(a la sombra)
ofrece un beso.-




                                                                                                     Francisco Checa


Imágenes: Pinturas de Rusdi Hassan





quiquedelucio@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario