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jueves, 1 de febrero de 2018

Tropical


Séptimo año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 2.500 escritores, respetando el derecho de autor.






Publicación N° 1.933-


                             
                                                                                                                                Ana Lilia Chig

Poeta y gestora cultural de México, nacida en Los Mochis, Sinaloa, en agosto de 1974. Comienza su actividad literaria en la ciudad de Tijuana, lugar donde actualmente reside colaborando en diversas revistas y suplementos de poesía. Ha dedicado parte de su vida a la promoción cultural, colaborando con organizaciones en la promoción y difusión de actividades. Es fundadora de la revista mensual de Poesía "Frontera Esquina" y de Nodulo Ediciones.


                                                                                         "algo tan tibio como el café, la noche
                                                                                          extraviada, algo como nombrar en silencio
                                                                                          el amor propio, algo no dicho 
                                                                                          cada instante frente a ti"












TROPICAL

Te amo. Inmóvil acaricio la placidez de tu frente,
penetro más allá del cálido abrazo sujeto a la nostalgia,
más allá de la promesa -pacto obligado que sosiega el dolor-.
Sucede que te amo cuando la roca se derrama en los abismos
y un calor del trópico detiene su marcha en la habitación.-



NOCTURNO

Posé mis manos sobre la noche dilatada.
Un húmedo rumor deshabitaba el cielo y sus estrellas.
Fue el tiempo, ociosidad de un deseo esculpiendo los instantes.

Vientre, sombra, bahía, fluente de lluvia oscura.
Parpadeo, relámpago furioso del acto consumado.

Quedó el cuerpo desnudo en la quietud de los latidos,
río estremecido en el sueño de un invierno agonizante.-



CREENCIA

Tu vientre es un parque de incendios protegidos,
adentrado umbral donde las rutas germinan claridades,
la semilla desnuda cayendo a tierra entre la lluvia.

Tú eres el milagro de un lenguaje edénico, del frío incierto
sostenido entre latidos, la primordial morada de la noche.
Eres el proverbio estéril precipitándose
al vacío de los sordos.

Tu piel es camino de palabras inusuales,
una escala continua,
el lomo de una nube aglomerada
entre mis manos.-



AÚN EN OTOÑO

Voy a correr para alcanzar un cuerpo
alejar las manos que descienden mi cintura
Cortaré esas felpas nacidas debajo de la cama
hacer lo que el tiempo, una vida sin patria

Arrojarme ebria bajo los puentes,
junto a los musgos
remontar escaleras, paisajes,
el deseo constante de su boca
Dormitaré entre nubes inventadas en las manos
mientras concilio la pugna del polvo y la ceniza

Diré finalmente las palabras que se dicen
al despedirse amores, hijos o ciudades.-



REPETICIONES

Contemplo desde el arco, estrecho el cielo
suelto el cabello, aroma jabón y salvia
Pie desnudo, la mirada cargada de imposible
camino por pasillos de la ciudad, el corredor, la línea

Pasan nubes diluyendo el tiempo,
tic tac tic tac...los segundos
detenida en el barandal a mitad del puente,
observo y callo
Nada que decirle a quien convoca este instante,
sólo gestos, murmullos, muecas a la noche

El desnivel del río, las hogueras lejanas,
voces clamando por sueños en botellas
pasan carros, huyen de la garita con logros ocultos
un avión levantando el vuelo
encima de la Libertad.

Quizás te buscaba entre las calles y mi pensar
en las siluetas que poco a poco se acercaban
a esta sombra
Quizás era sólo tomar conciencia del tiempo y no soltarlo
Des-mem-brar-lo  len-ta-men-te  en su avance

Para no disiparte
para no perderte a ti...en él.-



SIEGO

Quieta, ante rezumos de la tarde
fija en simétrica piedra junto al río
Vendas del tiempo sostienen mi cuerpo
fracturado
Muros negros se alzan impasibles
la noche tiende su alambrada
mi alma, escombros de un llanto sostenido.-




                                                                                                                            Ana Lilia Chig



Imágenes: Pinturas de Malkon Liepke  (contemporáneo)









quiquedelucio@gmail.com

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