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sábado, 31 de marzo de 2018
Partícula
Séptimo año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a más de 3.000 escritores, respetando el derecho de autor.
Publicación N° 1.992-
Antonio Tello
Poeta, narrador y ensayista argentino. Publicó su primer libro "El día en que el pueblo reventó de angustia" en 1975. Posteriormente estuvo radicado en París y luego en Barcelona. De regreso a la Argentina la Editorial Tusquets le editó "De cómo llegó la nieve" (1987) y luego "El interior de la noche" (1989), "El hijo del arquitecto" (1993), "Los días de la eternidad" (Muchnik Editores, 1997), etc. En 2004 la Editorial Candaya editó su poemario "Sílabas de arena" al que le siguió "Sílabas de arena II " y "Conjeturas acerca del tiempo, el amor y otras apariencias". Asimismo ha publicado los ensayos "Extraños en el paraíso", "El Quijote a través del espejo", "Historia breve de Argentina", etc.
"Insisto, acaricio, lavo.
Día tras día, insisto. La abrazo.
Ella resiste en su inmovilidad
y como el viento pasa la voz"
PARTÍCULA
Descubro sus ojos
en el escaparate de lámparas ciegas.
Sin verme,
su mirada me atraviesa y de pronto siento
las formas elementales de la materia,
la química precisa del abrazo que me convierte
en un diminuto cataclismo del tiempo.-
CALENDARIO
Los cuerpos supieron de la felicidad
antes de oír hablar del amor. Y
sucedió que al descubrir su nombre,
la felicidad ya era un recuerdo.-
de NADADORES DE ALTURA
Siete segundos. Siete días. Siete eternidades.
El tiempo que dura el abrazo.
¡Pobre alma, que necesita de la materia, esa tensión que perece,
para conocer los sentidos!
¡Pobre espíritu, que necesita del amor, esa fantasía de la carne,
para conocer la emoción!
Sí, el tiempo que dura el abrazo.
Siete eternidades. Siete años. Siete días. Siete segundos.-
ACASO UN SUEÑO
Una visión: Acaso un sueño.
Una llanura que parece un desierto y
un lago que parece un deseo.
Ausente el tiempo,
la mirada que lo abarca todo
justifica esta tarde sin ocasos, mientras
la arena arde y quema
los labios que la tocan.
Sumergidos en
las aguas, un hombre y una mujer
se abrazan. No se temen
sino a sí mismos y por eso hablan o creen
hablar.
Él evoca una cicatriz de fuego y el beso
que la causó.
Ella, que siente la caricia,
agita las aguas, desnuda el cuerpo
en el espejo; él, que la observa,
imagina ser el reflejo y también la luna
que lo provoca.
Pero, en esta tarde que no atardece,
como herida por un instante, ella aparta
la mirada de la mirada y el silencio prevalece.
No hay dolor.
Están solos.
Una presunción: Acaso son dos sueños.-
METONIMIA
La veo acercarse
y la luz de la tarde
inflama la silueta de arena bajo las dunas;
el movimiento del tiempo bajo el vestido.
La nombro
y la visión del nombre
enfebrece las estrías del aire;
atrae mis labios y ellos,
los labios,
con un temblor de mariposa,
se posan sobre las humedades
que especula el deseo.
Pero, yo sigo aquí,
convertido en mirada viéndola venir:
sin ojos, sin boca, sin cuerpo:
un instante que mira.-
TESEO
Deseo cerrar los ojos;
palpar el vano de tu puerta.
Entrar en tu noche;
desovillar el anhelo de la carne.
Ser la oscuridad. El olvido de la luz.
Ciego. Sin más bastón que el deseo.
Sentir en las entrañas de la cueva
el alarido del monstruo.
El temblor del tiempo
perdiéndose en la nada.-
Antonio Tello
Imágenes: Fotografías artísticas de Donna Stevens (contemporánea)
quiquedelucio@gmail.com
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