Vistas de página en total

lunes, 18 de mayo de 2015

Doble invierno

Quinto año de una antojadiza antología de la poesía de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Esta pretende ser una antología cuyo sentido radica en la actividad del lector, en su lectura que organiza los textos como un proyecto de su propia aventura y goce creadores. Difundiendo a los hacedores, respetando el derecho de autor.



                                                                              Christian Law Palacín

Poeta , periodista , traductor y crítico de cine español, nacido en Madrid en 1973. Ha escrito los poemarios: "Pendientes en la noche" (Madrid, 2003) y "Algo menos que el corzo"  (Valencia, 2009).


                                                                                          "Te llegarán , mi amor,
                                                                                           como los lobos:
                                                                                           invierno, fronda aprisco,
                                                                                           a cielo abierto"  






DOBLE INVIERNO

Extraño es que la nieve dé plenitud al frío.
Pero aún lo es más que el blanco boreal
desentierre el pasado. Una mañana
regresa y un invierno en un jardín
inglés y, netamente, los juegos y las voces
de algunos que hoy ya han muerto
rompen el aire. La constancia
del vivir, aún tan frágil, tenía en el olvido
aquella nieve. Vuelve
ahora en esta otra, y es muy honda
la tristeza por ser inesperada.


NORMANDÍA

Julie, con un instante debería bastarnos:
los dos en la escalera riendo hacia la lluvia.
(Es como Normandía,
dijiste en un idioma apagadizo
al sentir el nublado sobre el rostro.)
¿No es esto suficiente? ¿Es más perfecto un sueño?
Cuando arrasan tormentas
los años, ¿imaginas
en tan breve aventura hallar refugio?-


SON ASÍ

Son así los sueños, no hay nadie
que anticipe su rostro. Saben
nutrirse de un verano, de la cueva del viento,
de los oceanarios matinales,
de un desnudo integral en la academia.
Llegan de todas partes, a veces de los muertos
que vienen a habitarnos,
de sus áperas arpas
que siempre sonarán donde pisemos.
Son así,
los niversos fuertes
deciden concurrir ante nosotros.
Puede esperarse al circo y al cometa,
a los galgos ahorcados, a los héroes de sombra
de Conrad en los sueños.
Hay quien elige, sin embargo,
ir a su encuentro a la intemperie,
quien logra abrirse paso
en el desbordamiento prodigiosos,
quien recorre las duna que custodian
el milagro en la noche
y allí busca
el lugar del abrazo con la ausente.-


PISCINA

Bajo soles furiosos es prado de agua dulce
destinado a la dicha, radiante como gala
de cristal de Swaroski. Pero cuando se vuelve
inesperado impluvio que agobian las tormentas,
los bañistas padecen carencia de zafiro.
Venus Anadiomena a menudo deslumbra
en urbanizaciones con piscina. John Cheever
eligió, en su escritorio, trenzar oscuridades
con sus oros azules, porque vio, entre ginebras,
las teselas celestes transformarse en miradas
abisales. Igual a sí misma, y diversa
según cada aventura, lo mejor es lanzarse.
¿Dedicaremos junio, sin prisa, a deslizarnos?-


  NADADORA

Ha caído la tarde sobre el césped
y la piscina. Solitaria, lenta
en las amplias brazadas con que anuncias
tu presencia en el mundo, vas mezclando
el largo azul y su caudal dormido
con música de tibia plata húmeda.
El sol final de llamas encendidas
no será para ti, tan esperada,
y se aleja, cumplida ya su agenda,
por los remotos cielos transmarinos
entre satélites indiferentes.
Hubieras elegido el mediodía
de ser la luz lo que necesitaras,
pero han venido sólo por el agua,
ventura incomparable para un cuerpo.
Por oscuro que sea el encontrarte
como un ensueño breve, amor aún vivo,
bajo una toalla para cuando salgas
serena de tu baño hacia la noche.-


NARANJO EN CARABANCHEL

Crecido en la rudeza de un barrio perisférico,
a sus espaldas un graffiti
con las tildes de oro
ejerce de horizonte de febrero.
        Diría
que sus ramas se buscan perfumadas
en la altura del aire.
Que sus horas inciertas,
expuestas a una doble
ira, municipal y adolescente,
despliegan entereza en equilibrio.
Que todo empieza a resultarle ajeno
salvo el gorrión
y el agua.-



                                                                             Christian Law Palacín


Imágenes: Pinturas del artista Enriquillo Amiana (Santo Domingo, contemporáneo)




quiquedelucio@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario