Vistas de página en total

lunes, 21 de abril de 2014

Poesía de Perú-Francia

Una antojadiza antología de la poesía hispanoamericana de todos los tiempos, seleccionada por el escritor Quique de Lucio. Para difundir a los creadores, respetando el derecho de autor.



                                                            Feliciano Mejía

Poeta y narrador peruano nacido en Apurímac en 1948.  Hizo estudios en la Universidad Mayor de San Marcos de Lima y posteriormente se trasladó a Francia, donde reside, y completó sus estudios en la universidades de Le- Mirail, La Sorbonne y la de Caen. Ha publicado: "Poemas racionales", "Tiro de gracia", "Círculo de fuego", "Kantuta negra", "El país de los sueños", "Kantuta Roja y Yanaqa", etc.


                                                    "Arde brasa de ni corazón
                                                    ¿Hasta cuándo la noche durará?




TARANTA

Huellas de muerte en el polvo
raya la niña suicida;
alfanjes, sus brazuelos moros,
alfanjes agudos, sus pestañas.

Bajo el aliento caldeado
de matines, bajo el árbol
plateado de lo oscuro,
pasos de agonía daba
la tenue mujer enlutada.

Sudores vitrificados,
gritos verdes,
en el límite final
del vibrar de sus caderas.

Mugen y arañan los vientos, afuera
besando a los pordioseros.-


DOLORA VII

Como un alfanje moro,
como un florete de hielo,
como un fondo de horno
de oro incandescente,
como un rígido abismo
desgajando
su risa y su amor apretujado
en estos cinco siglos,
te pienso, amada.-


HIMNO VERDE

Albaicí de benjuí y lavanda en flor,
transida de mi alegría y amor:
deja que vaya hacia tus brazos
y me cobije en tu pecho,
mientras el corro de soldados
ronda
en las oscurecidas calles
y el bronco canto retumbe en la
oquedad.

(Cóndor y toro) (Serpiente y cielo)

Cúbreme con el olor de tu mirada,
protégeme ya (amada-amado);
y que el ojo vidriado no me vea,
hasta que pase el tiempo de la
sombra
y salte del carbón la Fogata
y muera el dolor.

Y haz que mis heridas duelan
menos,
haz que mi canto contenga eterna
miel,
haz que mi cólera como siempre
construya,
y al final, ven, conmigo...caminando
con todos, así, libremente...Amor!


SEGUNDO HIMNO VERDE

Cierto día, un día, lloró en silencio
Albaicí,
y de sus faldas huyó el copo de
alegría.

Su perfil se fijó en las ramas del
melocotonero en flor,
en las riberas de las montañas
llenas de humedad y verdor:
hoy, donde sus huellas pasaron
rebotan los recuerdos de las risas
de los niños
(ellos crecieron entre las palmeras
y las dalias)
destrozados por las bombas de
napalm
arrojadas entre las nieves de los
Andes.

Pero yo veo aún cómo caen las
lágrimas de la herida Albací...

Mi alma de nuevo se estremece
y se acurruca a sus pies;
sin embargo es largo mi camino
y pasa el tiempo
frotando sus dolores,
y pasa lento el torpor,
y viene el horizonte
repleto de sol puro y claveles rojos
en flor,
y veo
y reveo y veo que se acerca...
acercándose...!



                                                                    Feliciano Mejía 





Imágenes: Pinturas de la artista estadounidense Iris Scott. (contemporánea)


Publicación de Quique de Lucio para "Nos Queda
la Palabra"
quiquedelucio@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario